martes, 4 de febrero de 2014

Entre cristales y men-tiras

A veces tengo que mentir tanto para protegerme, que ya no sé de que material está hecho mi escudo. Y así será, hasta que el escudo se vaya desvaneciendo, dejando por el camino pedazos de incertidumbre disfrazados de una pizca de verdad. Caminando por la calle podría hacer que en cada casa estallaran todos los vasos de cristal, y me contentaría con ver los trozos caer al suelo como si de un día de nieve en pleno diciembre se tratara.

Mientras tanto, me pierdo otra vez entre los ejércitos de personas que vienen y van, más cansada que nunca, esperando el gran impacto, más doloroso que cuando graniza porque sí y el hielo te golpea en la mano, desgarrándote los nudillos.

Y así me quedaré, sin ninguna defensa, con mi escudo hecho añicos, descubierta a la verdad.






1 comentario:

  1. Joder tía... Esto es super bonito y lleno de sentimientos... Ya tienes una fan ;)

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